Como gran cierre del homenaje que Lobería le brindó a «Pincho» Castellano, el ídolo se subió y manejó por la ciudad lo que actualmente son piezas de museos de automovilismo: “La Laucha”, la cafetera con la que se inició en el automovilismo, y la naranja mecánica (Dodge) con la que se consagró campeón en TC en el 87.

La Laucha es la cafetera que se construyó en el taller de Enrique Castro, en Tamangueyú, con la que el 8 de septiembre de 1968 Castellano debutó en el campeonato Mar y Sierras con triunfo, en la serie y en la final, sumando luego más victorias y campeonatos en la divisional. Actualmente se encuentra en el Museo Fangio de Balcarce.

En tanto la Dodge preparada en Lobería con la que consiguió el campeonato del 87 en Turismo Carretera, se encuentra en el Museo del TC en el autódromo Mouras. Ambos vehículos retornan a Lobería y el 25 de noviembre serán sin duda uno de los atractivos de la jornada.

Durante el fin de semana los autos permanecieron en la explanada del Palacio Municipal, para ser observados y fotografiados por muchos. El sábado por la noche, con «Pincho» al volante así hacían vibrar las calles de Lobería: