El piloto argentino Juan Manuel Silva sufrió un serio accidente en la llegada a Bolivia. No sufrió heridas, pero debió abandonar la competencia. «Fue una desgracia con suerte. Nos asustamos muchísimo», dijo el chaqueño. Minutos después, el auto de un canadiense volcó y se prendió fuego.
El impresionante accidente ocurrió en la séptima etapa, ya en Bolivia. El vehículo del Pato dio varias vueltas. Él no sufrió heridas, pero su navegante, Juan Pablo Sisterna fue trasladado a Uyuni por una fractura en unos de sus pies.
«Fue fuerte en un lugar muy rápido. Levanté, pero me encontré con un badén con una rampa muy fuerte. El auto salta, pica y cae de punta. Fue una desgracia con suerte y ya sabemos a lo que estamos expuestos», señaló Juan Manuel Silva.
«Fue un momento de mucha tensión. Cuando nos bajamos, otro auto también volcó y se prendió fuego. Nos asustamos muchísimo y esos tripulantes pudieron salir ilesos. También casi vemos otros dos tumbos, esta carrera es así, la más difícil del mundo, casi 9000 km y tiene estas cosas», agregó el chaqueño.
“Recién cuando vi las imágenes tomé conciencia del golpe que fue. Cuando noté hacia donde iba la situación sabía que no iba a ser una más y que era para estar entre los tres más importantes», contó el Pato Silva el día después del espectacular vuelco que lo dejó fuera del Dakar.