Facundo Ardusso y Mariano Altuna dominaron de principio a fin la 13ª edición de los 200 Kilómetros de Buenos Aires, cita de la undécima fecha de la temporada, y con el triunfo, y ante las deserciones de sus rivales en el certamen, el Flaco de Las Parejas quedó a las puertas del bicampeonato en la categoría.

Altuna, por su parte, logró su quinto triunfo en la categoría, donde no corre a tiempo completo desde 2013. «Era un compromiso importante y le agradezco a Facundo por confiar en mí. No es fácil entregar un auto a esta altura del campeonato. Me hacía falta un resultado así», afirmó el loberense.

Tras la partida, Altuna tomó el liderazgo y Luis José Di Palma (Renault Fluence de Emiliano Spataro) se colocó detrás. José María López se metió tercero con el Toyota Corolla de Matías Rossi y, en el tercer giro, en plena recta, se ubicó como escolta después de una intensa pelea con Josito.

Al mismo tiempo, Néstor Girolami ingresaba a boxes con un inconveniente en la dirección hidráulica del Peugeot 408 y Leonel Pernía, quien había partido desde el séptimo cajón de la grilla, superaba a Franco Vivian en la recta y se posicionaba cuarto. Sin embargo, en la quinta vuelta, el Tanito superó a Di Palma y se situó en el tercer lugar.

En el décimo giro, Vivian debió ingresar a los boxes con el Cruze de Agustín Canapino por un principio de incendio (se prendió fuego el pontón derecho), lo que provocó que el habitáculo del coche se llenara de humo y le produjera un sofocamiento al bonaerense, quien fue asistido por el cuerpo médico con oxígeno, por lo que, quien llegó como puntero del campeonato, no pudo girar.

Cuando se cumplió el primer tercio de la competencia, Altuna continuaba al frente del pelotón, con casi un segundo y medio de diferencia con Pechito López y casi cinco sobre Pernía. En los boxes, en tanto, los equipos se preparaban para el reemplazo de los pilotos y, en algunos casos, de las cubiertas delanteras.

En la vuelta 25, Rossi se subió a su Corolla, Spataro a su Renault y Mariano Werner a su Peugeot, pero un problema con la colocación de la rueda izquierda lo retuvo por demás. En la ronda siguiente, Ardusso tomó la posta de Altuna y salió delante del Toyota de Rossi, quien se despistó y, posteriormente, desertó por una baja en la presión de aceite del motor.

Otro golpe de escena se produjo en la vuelta 32, cuando el Fluence de Pernía, con Norberto Fontana al volante, se retrasó por un inconveniente en la caja de velocidades, perdiendo el segundo puesto que lo colocaba como escolta de Ardusso en el torneo. Un rato después fue abandono.

De esta manera, Ardusso solo tuvo que dedicarse a girar, mantener los más de 13 segundos sobre su compañero Spataro (abandonó en la última vuelta por un problema en una rótula) y encaminarse al éxito.

Fuente: Campeones