QUEQUÉN- Una mujer se salvó milagrosamente luego de que un sector de los acantilados de Quequén se desmoronara sobre ella. Después de dos horas pudo ser rescatada y la trasladaron al hospital Ferreyra de Necochea.
Una mujer de la localidad de Huanguelen, de 34 años, se encontraba con su hija y su esposo juntando piedras y caracoles, cuando un pedazo barranca de unos 15 metros lineales cayó sobre ella.
En el lugar había varios turistas que al ver la situación descendieron y comenzaron a socorrer a la víctima. Al mismo tiempo, uno de ellos se comunicó con la central de emergencias 911, dando comienzo al movimiento de rescate.
David Malcolm, esposo de la mujer que había quedado enterrada entre tierra y rocas explicó: «la ayudé a mi mujer en lo que pude, mientras mi hija corrió a la calle costera para solicitar ayuda. Escarbé hasta donde podía y la encontré. Le destapé la cara para que pudiera respirar y enseguida comenzaron a llegar policías, bomberos, ambulancias, Prefectura, la verdad, que la gente se portó bárbaro”.
El operativo de rescate duró más de dos horas, ya que la vida de la mujer corría serio riesgo porque una roca de miles de más de 2500 kilos había quedado suspendida en el aire a escasos centímetros de su cuerpo. Con el uso de una retropala pudieron sostener la pesada piedra para que los rescatistas accedieran y sacaran a la víctima.
«Volvió a vivir, teniendo en cuenta lo sucedido y la roca tan pesada que había quedado suspendida a unos cincuenta centímetros de su cuerpo. La verdad que Dios estuvo con nosotros, nos ayudó para rescatar a esta señora, quien tuvo una fractura en una de sus piernas, según me dijeron en el Hospital”, relató uno de los vecinos que ayudó a socorrer a la mujer.
«Con la retropala pude contener la piedra que pesaba por lo menos 2.500 kilos, mientras los socorristas trataban de sacar a la señora. Teníamos que tener mucho cuidado porque si la roca se caía la hubiera aplastado a esta mujer”, contó Martín Zagame, quien operó la maquinaria durante el rescate.
