Oscar “Pincho” Castellano regaló un inolvidable momento a todos los loberenses y a todos sus fanáticos este domingo, al subirse al Ford con el que fue campeón en 1989 para protagonizar el “Duelo de las Estrellas”, organizado por la ACTC en La Plata. La leyenda loberense del automovilismo ganó la carrera simbólica y después regaló unos trompos para hacer delirar al público. A su lado, totalmente emocionado, estuvo su hijo Jonatan.
Oscar Castellano se retiró oficialmente en 1991 tras ser subcampeón y de haber alcanzado 3 títulos de TC. Johnny De Benedictis se bajó en 1995 tras protagonizar un grave accidente en Balcarce, mientras que Emilio Satriano corrió por última vez en la temporada 2000.
Castellano, Satriano y De Benedictis son apellidos que marcaron una época del Turismo Carretera y los tres volverán a la pista para ser parte del «Duelo de las Estrellas». «Pincho», Emilio y «Johnny» se subieron a sus autos que se encuentran en el Museo del autódromo de La Plata.
Castellano giró con Jonatan y hasta se permitió mirar para atrás cuando se percató que Jhonny se iba en trompo luego de pisar una mancha de aceite. Satriano, en tanto, no intentó hacer nada difícil y disfrutó de un momento único.
Pincho cruzó la llegada en primer lugar y, en medio de los aplausos del público, puso la naranja mecánica a hacer trompos, para emoción y delirio de los fanáticos y, por supuesto, de Jonatan.
Tras la carrera, totalmente alegre por lo vivido Pincho dijo que “revivir un poquito está bárbaro” y bromeó sobre el despiste de De Benedictis: “Me quedé sin compañero enseguida”.
En tanto Jonanatan dijo que fue “un momento que no creía vivir” y halagó a su padre: “sigue siendo el grande de los Castellano. No podía mirarlo mucho porque me emocionaba. Es un grande y sigue con la magia intacta”.