La peor tormenta en los últimos 40 años en Neuquén provocó que la gobernación dispusiera el cese de las clases y del transporte público. Hay asueto administrativo municipal, provincial y judicial y cierre de grandes comercios. El fenómeno también afecta a parte de Río Negro.
Las autoridades provinciales y municipales de Neuquén reunidas en un Comité de Emergencia decidieron paralizar hoy todas las actividades públicas y privadas por los efectos de la tormenta «Lucrecia», considerada la peor de los últimas cuatro décadas, que comenzó a sentirse desde esta madrugada.
El gobierno neuquino declaró la emergencia climática y definió la suspensión de las clases en todos los niveles en gran parte de la provincia, además de decretar el asueto en la administración pública provincial y en al menos cinco de los municipios, entre ellos la ciudad capital, que se ven seriamente afectados por la tormenta.
Las lluvias se iniciaron el miércoles en el Alto Valle de Río Negro y Neuquén, pero la tormenta principal se registró entre la madrugada y las 9 de la mañana de hoy. El fenómeno climático hizo recordar al devastador temporal registrado en esa región en 1975, que causó la muerte de unas 20 personas.
«Lucrecia», bautizada así desde las redes sociales, llegó a la región y se espera que produzca precipitaciones de entre 100 y 200 milímetros, que equivalen a la media anual en toda la provincia.
«Hoy Neuquén va a estar inundado. Que la gente trate de quedarse en sus casas. Cada uno tiene que estar preparado para esta situación. Es imposible estar preparado para esta estructura de lluvias», había anticipado el intendente de la ciudad de Neuquén, Horacio Quiroga.
En pocas horas prácticamente se triplicó el número de evacuados: en el amanecer del día eran 547, pero cerca del mediodía ya son más de 1.300 las personas que debieron ser reubicadas.
Esta mañana, Quiroga contó en radio La Red que las personas que debieron dejar su casa por los efectos del agua «están distribuidas en escuelas y centros integrales de la municipalidad, con todas las previsiones de abrigo y alimentación».
La posibilidad de que la situación se agrave por el desborde de los cauces de agua fue desestimada por el intendente: «Esto es agua que cae de lluvia, no hay crecida de ríos, que están relativamente bajos».
Durante la madrugada, varios vecinos recurrieron a las redes sociales para subir fotos y mostrar el drama que están viviendo: barrios de la capital provincial completamente anegados. Las casas quedaron en medio de «ríos». Las imágenes recuerdan las inundaciones de hace justo un año atrás que sacudieron a la provincia de Buenos Aires y a la Capital Federal.
Anoche, el temporal ya se hacía sentir y azotaba algunas rutas provinciales y nacionales. Según Diario Río Negro, la ruta nacional 22, tramo Zapala – Neuquén, estaba intransitable debido a la acumulación de agua y barro sobre la calzada.
El Comité de Emergencia le pidió a toda la población permanecer en sus hogares al menos hasta el martes. El ministro de Seguridad de la provincia y miembro de la junta, Gabriel Gastaminza, remarcó la solicitud: «Salvo que sea indispensable, no salgan a las rutas».
El secretario de Coordinación del municipio neuquino, Marcelo Bermúdez, sostuvo que «todos los barrios de Neuquén van a sufrir estas inclemencias climáticas» y solicitó que aquellas personas ubicadas en casas inundables «tomen la decisión de autoevacuarse».
El mismo funcionario confirmó que en medio del temporal se registró el fallecimiento de una persona que sufrió un paro cardíaco. Aunque no lo vinculó estrictamente al desastre que afecta a la provincia, el jefe de Gabinete municipal tampoco descartó que el contexto hubiera influido en la crisis cardíaca.
En la localidad de Plottier, minutos después de las 3 de la mañana, algunos sectores de la ciudad se quedaron sin suministro de energía eléctrica. Una hora después la luz se cortó en toda la zona.
Vecinos del norte y el oeste de la ciudad se quejan por el mal funcionamiento de las líneas de emergencia, que se encuentran saturadas y señalaron que debieron asistirse por su cuenta.
Diferentes organizaciones sociales, sindicatos y partidos políticos se pusieron a disposición para acopiar alimentos no perecederos y todo tipo de material que pueda servir para ayudar a los damnificados.
En Río Negro, también por la llegada del temporal se suspendieron para hoy las clases en gran parte del territorio, salvo en Viedma, Bariloche, El Bolsón, Río Colorado y General Conesa. Se estima que el clima en la región mejorará recién el martes.