garrafa socialEl jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, advirtió hoy que el Gobierno sancionará a los distribuidores y comerciantes que se abusen y aumenten el precio de la garrafa social de gas licuado de petróleo.

El funcionario se quejó de los «vivos» que intentaron «sacar ventaja» al programa «Hogares con garrafa» lanzado la semana pasada por la presidente Cristina Fernández, para beneficiar a quienes no cuentan con servicio de gas por red.

Fernández precisó que la secretaria de Energía, Mariana Matranga, «los ha puesto en caja como corresponde» a quienes se «creyeron piolas» y «se mandaron un ‘aumentito?» en el precio de las garrafas.

La creación del programa fue formalizada con la publicación en el Boletín Oficial del decreto 470/2015, firmado por la primera mandataria, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández; y los ministros Axel Kicillof (Economía) y Julio De Vido (Planificación Federal).

La norma apunta a redireccionar hacia la demanda el subsidio que otorgaba el Estado para el consumo de garrafas de los sectores de menores recursos, que está orientado, con el plan anterior, hacia la oferta.

El decreto indica que «el estado nacional subsidiará o compensará de manera directa» a los «titulares de hogares de bajos recursos o de viviendas de uso social o comunitario, consumidores de GLP envasado, que estén en zonas no abastecidas por el servicio de gas por redes».

En su habitual conferencia de prensa, Fernández aseguró que tras el lanzamiento del programa aparecieron «un montón de vivos para sacarle ventaja al tema».

Se lamentó que esos «vivos» ya «se mandaron un ‘aumentito’ para sacar una ventaja adicional», pero aseguró que, el Gobierno ya les reclamó retrotraer esos valores bajo apercibimiento de posibles sanciones.

El funcionario, además, destacó las obras de los gasoductos del NOA y del NEA, señalando que ellas «permitirán bajar los costos del oprobio del costo de las garrafas».

En ese contexto, afirmó, dirigiéndose a los comerciantes, que «o se ponen las cosas como corresponden o los sancionaremos» y habló de la posibilidad de «multar a los vivos de siempre».