Luego del incendio del viernes que afectó a alrededor de 30 hectáreas, el fuego se extendió y avanzó unos 500 metros durante la tarde del sábado, llegó a un pequeño monte y se acercó peligrosamente al algunas viviendas, por lo que la tarea de los Bomberos de Lobería consistió en evitar que el fuego llegara a las casas cercanas.
El fuego ya había arrasado algo más de 20 hectáreas de monte talado y pastizales en la zona del Monte González, y afectó al menos unas 8 hectáreas sembradas de soja durante el viernes, en un incendio que habría sido provocado intencionalmente.
Tras controlar esa situación, en la tarde del sábado, alrededor de las 15, los bomberos fueron alertados de que el fuego se había iniciado nuevamente y avanzaba con sentido noroeste, hacia terrenos al frente de la ex Incarlesa, donde se ubicaba la Sala Comunitaria de Extracción de Miel.
A diferencia del incidente del viernes, el incendio se extendió hacia terrenos donde hay algunas viviendas, por lo que la tarea de Bomberos se orientó desde un primer momento en cortar el avance de las llamas hacia esos sectores.
Luego el fuego alcanzó una zona de eucaliptos y el acceso con los camiones resultó casi imposible, además de la complicación de avance con las autobombas ya que los terrenos presentaban algunas cavas menores y también debieron cortar alambradas para poder llegar a la zona de conflicto.
Tras más de tres horas de labor, con la colaboración de algunos vecinos, los bomberos pudieron detener el avance del fuego y ninguna propiedad resultó damnificada.