El procesamiento de los datos de la Encuesta Permanente de Hogares que el Indec hizo entre abril y mayo, determinó que 1 de cada 3 argentinos es pobre. El 32,2% de los habitantes de los 31 grandes distritos urbanos no fue capaz de reunir ingresos por todo concepto para comprar la canasta básica de alimentos y de servicios esenciales.
En conferencia de prensa, el equipo de técnicos a cargo del director del Indec, Jorge Todesca, explicó que «sobre una población urbana de 27,2 millones de habitantes, 8,77 millones se encontraban en estado de pobreza y 1,7 millones en condición de indigencia», esto es no contar con recursos monetarios para adquirir la canasta básica de alimentos.
Sobre una población urbana total en el país de unas 39 millones de personas, se estima que la franja que no pudo reunir los ingresos monetarios necesarios para comprar la canasta básica total de alimentos y servicios, involucró a un rango de 12,6 millones de personas.
Se trata de un valor a tono con la estimación que el 11 de agosto dio a conocer el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina.
El índice de indigencia fue estimado para el segundo trimestre de 2016 en 6,3% de una población urbana de 27,2 millones habitantes; y 4,8% de los hogares.
La extrapolación de la estimación parcial al total del país, con el agregado de las poblaciones rural, esto es poco más de 43,5 millones de personas, arroja que la pobreza afecta a 14 millones de habitantes y la indigencia a unas 2,7 millones de personas.
Macri sobre la pobreza
«Nos duele que uno de cada tres argentinos esté por debajo de la línea de pobreza», sostuvo el jefe de Estado al tomar la palabra. «Hoy sabemos cuál es la realidad. Este punto de partida es sobre el cual acepto ser evaluado como Presidente: por si pudimos reducir la pobreza en este gobierno», señaló cuando le pidieron una autocrítica por los argentinos que cayeron en la pobreza desde que asumió (1,4 millones según un estudio de la UCA).
«Hay una cantidad enorme de argentinos que no la está pasando bien, les decimos que estamos trabajando todos los días para ir a pobreza creo», indicó el mandatario, aunque reconoció que ese objetivo «es obvio que no puede alcanzarse en cuatro años».