Un policía bonaerense mató de un disparo a un adolescente de 16 años, en la vecina ciudad de Miramar. Las causas del hecho son materia de investigación, a cargo de la fiscal Ana María Caro.

El hecho ocurrió cerca de las 4.30. El adolescente de 16 años iba en moto rumbo a su casa y pasó por un control policial donde se encontraba el efectivo. Las primeras versiones dan cuenta de que el patrullero persiguió al chico y le pegaron un tiro.

La policía de la provincia de Buenos Aires fue apartada de la investigación comandada por la fiscal Caro y la recolección de pruebas y testimonios quedó a cargo de otra fuerza policial.

La fiscal dispuso que el oficial de policía Maximiliano González, de 25 años permanezca aprehendido, al menos, hasta tanto preste declaración indagatoria. La acusación en su contra es homicidio agravado por ser el autor funcionario policial en cumplimiento de funciones y tiene la prisión perpetua como pena en expectativa.

González está sindicado como el autor del disparo al adolescente que le provocó la muerte. Extraoficialmente, el policía que participó de la persecución al adolescente que volvía en moto a su casa dijo que se le escapó un disparo cuando el joven arrancó la marcha sobre él al intentar huir.

En el lugar del hecho se vivieron momentos desgarradores cuando los familiares se encontraron con el cadaver. Con el cuerpo del joven aún en el piso y mientras la Policía Científica realizaba pericias, familiares de la víctima y amigos protagonizaron algunos incidentes contra la Policía que reprimió con balas de goma.

Un testigo que vive enfrente de donde asesinaron a Luciano Olivera aseguró que es escuchó a los policías de la Bonaerense decir «‘qué hiciste’, ‘lo mataste'». Además, aseguró que los efectivos modificaron la escena del crimen.

«Yo estaba festejando mi cumpleaños, salí y se escucharon dos disparos, pero sin ninguna señal de alto ni sirenas», contó el joven identificado como Alexis en C5N.»Enseguida se acercó un policía agarrándose la cabeza y diciendo a sus compañeros ‘¿qué hiciste?, lo mataste, llamá a la ambulancia’… La ambulancia vino y se fue», agregó.

Luego el testigo indicó que el patrullero iba detrás de la moto, lo que podría concluir que el disparo fue por la espalda. Además aclaró que cuando él salió, la camioneta estaba mirando en la misma dirección de la moto y cinco minutos antes de que llegara la gente, la cambiaron de lugar.