El presidente Alberto Fernández volvió a referirse este lunes a la polémica originada por la fiesta de cumpleaños realizada en la Quinta de Olivos en medio de la cuarentena estricta de 2020.

“Yo no soy ni me hago, no tengo una doble faz, todo el fin de semana me la pasé leyendo las cosas que decían los hipócritas y me cansé de recibir el cariño de mis compañeros. Y cuando más veía lo que decían los que me criticaban, más contento estaba de estar con mis compañeros y con este pueblo”, introdujo durante un acto que encabezó en La Matanza.

“Efectivamente, en la pandemia, por un desliz, por un descuido, se organizó una comida en Olivos que no debió haberse organizado. Yo no anduve con vueltas. En menos de 24 horas dije que esto pasó, que no debió haber ocurrido, tengo mucho pesar por lo sucedido y de ese modo me disculpé ante ustedes, ante el pueblo, los únicos a los que les debo unas disculpas”, aseguró.

“Algunos leyeron mis palabras sinceras, honestas, de arrepentimiento a su modo. Algunos fueron tan miserables que dijeron que le eché la culpa a mi compañera. El único responsable soy yo: me hago cargo, doy la cara y me pongo al frente de todo esto. Y si alguno piensa que me van a hacer caer por un error que cometí, sépanlo, me fortalecen, me generan más fuertes convicciones, aumentan mi compromiso con ustedes”, completó.

El viernes pasado, luego de que se conocieran fotos de una fiesta de cumpleaños realizada en la Quinta Presidencial de Olivos el 14 de julio de 2020, el jefe de Estado pidió perdón con una frase que generó polémica incluso dentro del Frente de Todos: “Mi querida Fabiola convocó a un brindis que no debió haberse hecho”. El ministro de Seguridad de la provincia de Buenos, Sergio Berni, y el dirigente social Luis D’Elía -entre otros dirigentes afines al oficialismo- repudiaron públicamente la frase porque entendieron que había responsabilizado a la Primera Dama por el escándalo. Este lunes, Fernández pareció hablarles a ellos y también a la oposición, que impulsa un pedido de juicio político en el Congreso.

“Yo debí disculparme por una cena que no debió haberse hecho y el único responsable soy yo. Me muevo como un hombre común, me siento un hombre común y a veces no tengo en cuenta que soy el Presidente y debo dar el ejemplo. Fue un error, lo asumí y pedí disculpas. Pero lo que todos ustedes deben saber que nunca me van a escuchar pedir disculpas porque cerré el Ministerio de Salud, el Ministerio de Educación o el Ministerio de Trabajo. Nunca me van a escuchar pedir disculpas por arrodillarme frente al FMI y endeudé a la Argentina y a generaciones de argentinos como otros hicieron”, continuó en alusión a la gestión de Mauricio Macri.