Esta mañana una mujer atropelló y mató accidentalmente a su hija de 15 años tras perder el control del vehículo cuando salía de un estacionamiento en Capital Federal. «Cuando llegó la ambulancia del SAME a las 7:38 am, ya no se podía hacer nada», sostuvo el director del SAME, Alberto Crescenti. Intentan determinar si se trató de una falla técnica o de una mala maniobra.
«Cuando el equipo médico del SAME llegó al lugar, la chica ya estaba muerta. Nuestro equipo quedó muy shockeado. Tuvimos además que atender a la madre que fue trasladada al Hospital Fernández, donde habría intentado quitarse la vida por la pérdida de su hija. Estamos esperando las pericias policiales para saber qué tipo de golpe recibió», precisó Crescenti. Por su parte, un efectivo de la Policía Federal informó: «Estaba con este auto, con caja automática, realizando una maniobra, el auto quedó acelerado y atropelló a su propia hija y le quitó la vida».
Hay dos versiones sobre cómo ocurrió la tragedia: la primera que la madre perdió el control del vehículo cuando subió la rampa; y la segunda, que la joven se habría cruzado por adelante del auto justo cuando a la mujer se le trabó la caja e hizo una mala maniobra. Además, se evalúa si el perro que viajaba en el interior le provocó inconvenientes en la pedalera provocando la trágica maniobra. El desgraciado hecho ocurrió cerca de las 7:30 de la mañana cuando la madre iba a llevarla al colegio.
Los vecinos y testigos aseguraron que tras el accidente, la mujer tuvo un shock y una posible intención de quitarse la vida. Por tal motivo, fue trasladada al Hospital Fernández para recibir apoyo psicológico y clínico.
Un vecino del barrio y testigo de la tragedia contó que la víctima estaba esperando afuera del garaje a que su mamá saliera del estacionamiento por la rampa. «Siempre las veía cuando venían a pasear al perrito acá a la plaza», le dijo a la prensa. El hombre aseguró que la mujer salió a una velocidad normal por la rampa, pero la nena se cruzó por adelante del auto. Cuando la vio, ya tenía a su hija arriba del capot, la llevó arrastrando hasta el otro auto que estaba adelante. La madre estaba con una tremenda desesperación: lloraba, gritaba, la abrazaba y le limpiaba la sangre de la cara. La chica estaba con el uniforme de la escuela», relató el hombre.
