El ministro de Economía, Axel Kicillof, anunció una reducción en la escala del Impuesto a las Ganancias para la cuarta categoría a partir del mes que viene para los trabajadores cuyos sueldos se encuentran en la franja de 15.000 a 25.000 pesos, lo que representará una mejora en el salario de bolsillo que rondará el 6 por ciento.
«Impulsaremos una reducción en la escala en el pago del Impuesto a las Ganancias para la franja de trabajadores de 15.000 a 25.000 pesos brutos», señaló Kicillof durante una conferencia de prensa en el microcine del Palacio de Hacienda.
El ministro realizó este anuncio acompañado por el viceministro de Economía, Emmanuel Alvarez Agis, y el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray.
«Esta reducción impositiva abarca al 68 por ciento de los asalariados que pagan Ganancias y la reducción es mayor cuanto menor es el sueldo», aclaró Kicillof.
El ministro puso como ejemplo el caso de un trabajador soltero cuyo salario actual es de 20.000 pesos y paga 2.000 pesos de Ganancias.
«En este caso pasará a pagar 1.400 pesos, lo que representa una reducción del 32 por ciento y una mejora promedio del salario de bolsillo del 5 por ciento», señaló Kicillof, quien añadió que «para los trabajadores casados el incremento será del 6 por ciento».
«El Estado hace un esfuerzo porque si bien representa una caída en la recaudación (alrededor de 6.000 millones de pesos) le estamos dando mayor progresividad al impuesto, es decir que paguen los que más ganan», explicó.
Previamente, el jefe de la cartera de Hacienda había cuestionado los mitos que siempre giraron alrededor de este tributo.
«Son dos grandes mentiras cuando afirman que afecta a todos los trabajadores o se lleva todo el sueldo ya que abarca al 11,3 por ciento del total de los asalariados registrados, o sea que paga el que más gana, y tiene una incidencia en la recaudación impositiva de apenas el 6 por ciento», indicó.
Al respecto, añadió que «en el 2000 afectaba al 8 por ciento de los trabajadores y dos años después llegó al 9,1 por ciento, pero en el 2002 no debemos olvidarnos que había un desempleo del 23,3 por ciento, una situación muy distinta a la de estos días, con un desempleo del 6,9 por ciento y 1.400 convenios colectivos vigentes».
El ministro también se refirió a las discusiones salariales que se dan en el ámbito de las paritarias, que a su juicio son «básicamente una negociación entre trabajadores y empresarios, aunque hay medios como Clarín que pretenden enfrentar a los trabajadores con el Gobierno, a partir de un supuesto techo porcentual impulsado por esta administración».
«Nos preocupa que los empresarios pretendan trasladar los futuros acuerdos salariales a precios y no queremos que esto ocurra», subrayó.
Además se mostró sorprendido por un pedido de aumento en el boleto de tren proveniente del propio gremio que nuclea a los trabajadores ferroviarios.
«Escuché con sorpresa a un sindicalista pedir que se aumente el boleto con el objetivo de favorecer los salarios de los ferroviarios. Quiero decirle que el servicio es utilizado por 500.000 trabajadores diariamente y los ferroviarios son 16.000 con un salario promedio de 22.000l pesos», enfatizó.
De todas maneras, reafirmó que «ha habido una desaceleración en los precios desde abril del año pasado y no se puede negar, aunque la señora (diputada nacional Patricia) Bulrich y otros conocidos insistan en hablar de una inflación del 2 por ciento mensual y 30 por ciento anual, un pronóstico qué no cierra por ningún lado».
Finalmente el ministro dedicó unos minutos al tratamiento que el matutino Clarín le ha dado al tema paritarias en los últimos años.
«Arrancan con grandes titulares que indican un supuesto techo salarial impuesto por el Gobierno, pretenden generar tensión con los trabajadores y cuando se llega a un acuerdo, cómo se logrará ahora, lo publican chiquito, bien abajo», concluyó el ministro de Economía.