En una carrera que tuvo de todo, el loberense Mariano Altuna se quedó con la victoria en lo que fue la segunda fecha del campeonato 2015 del Turismo Carretera, en Toay, La Pampa. Un triunfo emocionante del Monito, que largó 12º y dio una clase de manejo con pista húmeda, dejando atrás en la última vuelta a Guillermo Ortelli. Con equipo propio y con su auto preparado en Lobería, Altuna celebra hoy en lo más alto del podio.
Desde el 29 de abril de 2012, en Trelew, Altuna no conseguía una victoria en la categoría máxima del automovilismo nacional. El positivo comienzo de año, con un meritorio y valorable sexto puesto en la fecha inicial, había hecho real aquella suposición de que con los nuevos motores multiválvulas, de mayor potencia, se podría apreciar más la calidad conductiva del loberense.
Y hoy ganó. Lo hizo de manera épica, en una carrera inolvidable para él y quienes la vieron. Largó 12º, por momentos bajo la lluvia y con pista húmeda durante toda la carrera, se fue haciendo lugar hasta quedarse con la carrera.
En la octava vuelta ya había avanzado hasta la séptima posición. Desde ahí lo de Altuna ya pintaba para ser un carrerón. Eso se confirmaba dos vueltas más adelante, en la décima, el de Lobería ya estaba quinto y un giro más le bastó para llegar a la cuarta ubicación.
Estuvo cuarto hasta la vuelta 13, aquella en la que se habilitaba el ingreso a boxes para realizar el cambio obligatorio de neumático delantero derecho, un ingrediente más de una carrera memorable. Altuna ingresó con los líderes de la competencia en la primera oportunidad y tras gran tarea de su equipo, fue superado solamente por Mauro Giallombardo.
De esa manera, aunque se generaba confusión en cuanto al verdadero liderazgo de la carrera, por los que no habían ingresado aún a boxes, Matías Rossi era puntero y el loberense estaba quinto.
Con el correr de las vueltas, Altuna superó fácilmente a Giallombardo y se ubicaba así a un escalón del podio. En la vuelta 24 apareció el pace car y todos se emparejaron. En el giro 26 Mariano no cesaba con el andar arrollador de su Chevrolet, al tiempo en que se conocía un recargo de 5 segundos al líder de carrera Matías Rossi –por una mala salida de boxes al momento del cambio del neumático- lo que colocaba a Altuna tercero, en el podio.
La gran carrera parecía ya estar hecha para el Monito, largar 12º y llegar al podio era un muy buen resultado. Pero en la misma vuelta 26 daría cuenta de Sergio Alaux para llegar a estar segundo. Adelante estaba Ortelli, se lo veía lejos para una hazaña del loberense, pero, a esta altura, lo hecho por Altuna daba esperanzas de que podía lograrlo.
Sería en el último giro. El Chevrolet número 27, preparado en Lobería, fue en busca del Chevrolet del múltiple campeón del TC, Guillermo Ortelli. Se puso a la par y no pudo superarlo en el primer intento, pero con su talento y su gran auto, Altuna fue por todo, siguió acelerando y lo sobrepasó para luego encontrarse con la bandera a cuadros y su octava victoria en la máxima categoría.
“Monito de película”, tituló la ACTC en su web oficial. “Titánico triunfo de Mariano Altuna”, destacaron. Fue así, una victoria inolvidable por el contexto climático, por las condiciones y circunstancias de la carrera y por la alegría que genera ver a un loberense en lo más alto del podio con su propio equipo, luego de un 2014 que le había sido totalmente esquivo en cuanto a buenos resultados.
